En fila, la oposición salió a repudiar el par de piñas que se comió un youtuber libertario por haber ido a provocar al Congreso durante la marcha educativa. Está bien. Es lo correcto. Cuando fue el intento de asesinato a CFK, la hoy ministra de Seguridad de la Nación dijo básicamente ante todo micrófono que le pusieron adelante que “se lo merecía”. Y cuando surgieron las dudas sobre la veracidad del hecho, fue la primera en darle su lustre patricio a las sospechas.
Lo cierto es que la violencia verbal, esas amenazas constantes en redes sociales, streamings y desde el mismo gobierno, incluyendo al presidente, termina engendrando violencia desde el otro lado. Miles y miles de manifestantes que ven como empeora su día a día por las políticas gubernamentales tienen derecho a protestar y contestar, porque se les prometió OTRA COSA.
Cobrar y “cobrar”
Esto no tiene un fin cercano y mucho menos agradable. Los youtubers libertarios, acomodados por la estructura servicial estatal, van a seguir apareciendo en cada manifestación a provocar y si no cobran por parte de los manifestantes, van a cobrar por parte de los servicios para construir el relato de IZQUIERDA VIOLENTA A LA QUE HAY QUE PROHIBIR. Como sucede en Polonia, Ucrania y otros países de la ex esfera soviética. Como sucedió en Argentina con estrepitosos resultados, siendo el caso mas conocido el del peronismo.
Estamos viviendo un momento histórico raro porque Milei llegó para aplicar el mismo programa del macrismo pero dentro de un renovado “período de Luna de Miel”, gracias al cual toda manifestación lógica y entendible a sus políticas neoliberales es observada como injusta por un buen porcentaje de la sociedad que aún no las sufre en todo su espectro. Con gente que, desde un rasgo de estoicismo, clama que “después de la fiesta toca aguantar” como si ese aguante fuera ecuánime en todos los estratos.
Es tal vez sospechoso el ámbito de jolgorio (o cinismo) que reina en los opinólogos propios. Como si nada estuviera sucediendo. Nada parece GRAVE.
Mismos nombres, otro partido
Durante el gobierno macrista se sucedieron varios actos represivos en pos de asentar una paz social mientras se efectuaba el desfalco de Luis “Toto” Caputo y Federico Sturzenegger. Ellos dos a la cabeza de una runfla de psicópatas a sueldo de la clase patronal nacional y las entidades financieras amigas, eran de lo más odioso que tuvo ese período. Hoy, partícipes del armado mileista y activos en un nuevo desfalco nacional, (¡incluso sus máximos responsables!) ante figurones desfigurados como Santiago Caputo, Daniel Parisini o el subnormal de Manuel Adorni, parecen casi normales.
El kirchnerismo comete diversos errores a lo largo de sus mandatos, entre los cuales, quizá uno de los mas graves, haya ocurrido partido en dos fechas distintas. La primera, el 13 de junio del 2007. La segunda el 22 de diciembre del 2011. Como militante me tocó protestar en ambas ocasiones contra la Ley 26734 mejor conocida como “Ley Antiterrorista”. La misma, con buena intención (y bastante presión internacional) es demasiado nebulosa en algunos aspectos y deja a interpretación del Poder Judicial que ES un acto terrorista, entre los cuales puede calificar por ejemplo, una protesta o manifestación. Es preocupante porque al día de la fecha, sin aplicar esta cuestionada Ley, el gobierno tiene un protocolo brutal de represión.
Repetir la historia
En este momento, por los efectos del veto a la Ley de Financiamiento Educativo Universitario, y por la situación general de la educación pública, son varios los colegios secundarios y universidades tomados por los estudiantes, entre ellos el mítico Nacional Buenos Aires, las Facultades de Filosofía y Letras, Psicología, Exactas, Veterinaria y Sociales dependientes de la UBA, por nombrar algunas instituciones. El Gobierno está plagado de los peores psicópatas que haya engendrado este país en sus últimos cuarenta años, y no es extravagante pensar en una nueva Noche de los Bastones Largos o incluso, una nueva Noche de los Lápices. Y si necesitamos evidencia, podemos analizar la cantidad de eventos con elementos parapoliciales o de inteligencia que se están materializando desde diciembre del 2023, con la asunción de personajes como Patricia Luro Pueyrredón Bullrich, más que probable servicio desde que se reivindicaba montonera.
Es probable que, dada la experiencia previa con la que cuentan muchos de los participantes actuales, sugieran al presidente al oído no cometer el error de dictaminar un Estado de Sitio con Toque de Queda como hizo Fernando de la Rúa previo a su renuncia en diciembre del 2001. El ideal que manejan es eliminar del pensamiento colectivo de la clase media esa trágica memoria. El ajuste y sus ejecutores son los mismos. Literalmente los mismos. Algunos más cerca del orbe. Otros más lejos de su resplandor pero igual cerca, como para que la sombra los esconda.
El presagio, en todo sentido, es de catástrofe.
MECHA es un proyecto comunitario que hacemos a voluntad. Si te gustó este artículo, te proponemos invitarle Cafecito a su autor/a/e como reconocimiento.