

Columna de Marcelo: Barrotes
Sobre 25 de Mayo, a cuadra y media de Plaza de Mayo y rodeado de edificios emblemáticos y tugurios plagados de seres siniestros, se encuentra un cafetín con barra donde, acodados, se encuentran operadores, operativos y sencillísimos servilletas. En su barra deslustrada, escancian pocillo tras pocillo sin demora, intercambiando datos, mentiras y medias verdades una fila de desvergonzados que viven del erario público y a veces del privado que también vive del erario público. En definitiva, que usted y yo siempre estamos pagando sueldos con el consumo de yogures y sin embargo, a menudo nos tratan de parásitos.
Hará tres semanas, antes de las elecciones porteñas en las cuales se dirimía, a tono menor el parquizado de unas plazas, y a tono mayor, el fin de los amarillos, se encontraron un asesor de segundo orden del Sincero (1) con un asesor de segundo orden del Intendente Felino (2). La charla fue un intercambio muy agradable. Ambos asesores se conocen del “Nacional” donde coincidieron generación y también trabajaron juntos en tiempos del fiestero de la Rosada.
-El ambiente es medio irrespirable- dijo (1) –Todos los rumores son ciertos. Todos eh. El de que tuvo una crisis y salió en bolas. Hay fotos de los laburantes de Olivos.
-Tiene que aguantar un período nomás viejo. Sosténganlo. Nicky, Rogelio, tu jefe. Alplax por intravenosa, pero son un par de años y ya está. Se retira en Annobón a ser pajeado por rubias con la cara desordenada.
-Que caro nos sale a los demás este experimento, la puta madre.
-Carísimo, pero mirá que sueldito que cobrás.
-El que cobrarías vos si estuvieras ahí dentro.
-Todos manejan los mismos planos. Era borrón y cuenta nueva. Diez añitos de orden fiscal, total, cuántos televisores se pueden comprar…
El dúo de asesores siguió hablando media hora mas delante de tacitas blancas con borra y manchones cuando (1) interrumpió la enésima anécdota de tiempos mejores.
-No me mandaste mensaje para charlar boludeces. ¿Qué pasó? O mejor dicho ¿qué quiere tu jefe?
-Ahora que el killer está fulminado y no va a joder por un rato, es hora de limar asperezas y acercar a las bases nuestras con las de ustedes.
-Ok. ¿Y cómo carajo planean lograr semejante quilombo?
-Es hora de avanzar a fondo con la jefa.
-¿A fondo… cómo?
-Barrotes.
-Se prende fuego el país.
-No. Ahí está la joda. Nosotros garantizamos gobernabilidad. Y apoyo incluso. Ya mandamos señales. Si Perón fue sopre…
-Y bueno, ahí tenes. Perón fue sopre y sin peronismo no se puede gobernar. Nosotros somos todos peronistas, ustedes, los amarillos. Los únicos que no son peronchos son los radicales y de repente te aparece un Santoro.
-No va a pasar. No es la misma época. Todos los medios van a acompañar, todos los partidos. Hay una fracción que va a salir a las calles pero pueden aplicar protocolo que no vamos a mover un dedo. A la herencia no la quiere nadie. Son invotables. La única que mueve el amperímetro es ella.
-Que jodido es el abogado de la UB.
-Es auténticamente peronista en la vocación de poder.
-En lo único que debe ser peronista.